lunes, 5 de abril de 2010

MENSAJES al corazón...

Dos abuelitas se dedicaban, los sàbados y domingos, a dejar hojas catòlicas en los bancos de los parques que se encontraban cerca de donde ellas vivìan. Un buen dìa, vieron a un hombre que corrìa detràs de ellas. Lo primero que pensaron, este hombre viene por nosotras. Su sorpresa fue mayùscula cuando se presentò ante ellas y con voz entrecortada y casi sin poder respirar, les preguntò :"¿Ustedes son las que dejaron las hojitas, en el banco?"
Las dos ancianas, casi al mismo tiempo, respondieron:" Sí, nosotras las hemos colocado"
El hombre, ya màs relajado, les declarò :"Gracias, gracias a ustedes, estoy vivo. Me encontraba en una situaciòn lìmite, lleno de angustia y sin esperanza ninguna. Habìa decidido quitarme la vida. Por curiosidad, tomè una de esas hojitas suyas. Empecè a leerla y vì que hablaba de Jesùs, quien me decìa que su Amor era fiel y que nada ni nadie podrìa impedir que El me amara, que podìa confiar en El... Esas pocas lìneas tocaron tan profundamente mi corazòn que me puse a llorar. Decidì vivir. Aquì estoy, decidido a empezar una nueva vida "
No es raro encontrarse con personas que dicen, todo convencidas:"¿De què sirve una hojita, una revista, una estampa, un mensaje de pocas letras?" Dios se vale de todo, incluso, de lo màs insignificante para tocar el corazòn de un ser humano y hacerle comprender la fuerza trasformadora de su Amor.
Por esa razòn, todos y cada uno de los bautizados, movidos por el Espìritu Santo, nos tendrìamos que dedicar a aprovechar lo pequeño, lo poquito que podemos y que està en nuestras manos, orando para que El utilice esa "nuestra pequeñez " para facilitar el que El pueda llevar a cabo sus planes de salvaciòn en favor de los hombres.

Si vièramos la realidad tal como Dios la ve, nos asombrarìamos, nos quedarìamos mudos de felicidad y asombro, al comprender la fuerza poderosa que tienen " nuestra pequeñez y pobreza " cuando las ponemos en las Manos de Dios, con una oraciòn, humilde y perseverante.
Tenemos muchas, muchìsimas posibilidades y oportunidades. Lo que hace falta es que tengamos el corazòn lleno de Amor. Sea por hojitas, sea por recortes de prensa o de revistas, mensajes de texto a travès del celular o internet... el bien que Dios quiere y puede hacer, en nosotros y por medio nuestro, en personas o grupos, no lo podemos imaginar siquiera.

¿ Què nos pide Jesùs, hoy ahora ? Que cada uno de nosotros pongamos, cada dia,- en sus Manos -nuestra pequeña buena voluntad. El se encargarà de hacer cosas muy hermosas y admirables, en personas, conocidas y desconocidas, que El ama y quiere trasformar.
¿ Nos animaremos a hacerlo ?

2 comentarios:

  1. Es verdad padre, puedo afirmar, siempre confié en el Sr, pero nunca quise abusar pidiéndole cosas,siempre agradecía todo, pero hace poco comenze a pedirle por otras personas y realmente veo cambios sorprendentes,eso si la oración diaria hecha con devoción y mucho amor.

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  2. Tiene toda la razón padrecito Dios se vale de muchas cosas para llegar a nuestro corazón, he tenido la oportunidad de enviar cantidad de mensajes por celular y a los instantes me dicen que han sido muy oportunos porque se sentian muy preocupadas y al leerlos se llenaron de alegria.Su hermana THAIS

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