jueves, 8 de julio de 2010

DIOS-TRINIDAD CUENTA CON NOSOTROS

" Hace unos años - declarò Mons. Fulton Sheen - yo viajaba en un aviòn de Nueva York a Boston. Junto a mi se sentò una señorita joven. Advertì que era de extraordinaria belleza.

¡Dios no me ha privado todavìa del sentido de la vista! Le dije a ella : Señorita, usted es muy bella. Serìa estupendo que emplease su belleza en dar a conocer la Belleza de Dios, a quienes no lo conocen. Pasaron unos años y Dios dispuso que nos volvièramos a encontrar. Fue entonces cuando la muchacha me recordò : Aquellas palabras que usted me dijo me llegaron muy adentro y me hicieron pensar. Tiene que ser maravilloso entregarse a Dios para que otros le conozcan. Por eso, me decidì a entregarme a Dios para lo que El quiera de mi. Tras unas reuniones, ella se consagrò a Dios como misionera.Vive feliz sirviendo a los leprosos en Vietnam "

Esta anècdota, simple y simpàtica, es tan hermosa como elocuente, ya que al mismo tiempo que provoca una sonrisa cuando la leemos, nos ofrece un mensaje, una enseñanza muy pràctica.
Podemos preguntarnos : ¿ Què quiso decirnos este obispo al compartir - con cada uno de nosotros - esa experiencia personal que el viviò en un aviòn ?
Ustedes viven muchos encuentros, muchas situaciones momentos de gracia ¡màs de las que puedan imaginar! que las han de considerar oportunidades que Papà-Dios les concede para tocar el corazòn de las personas en orden a compartir nuestra Fe. Es el Espìritu Santo el que prepara el terreno, el que nos impulsa a vivir receptivos a sus inspiraciones, a mantenernos unidos a El, como instrumentos suyos. El quiere quiere que nos aficionemos a vivir bajo su guia, abiertos y disponibles para lo que El quiera hacer en nosotros y por medio nuestro.
Esta es la clave para ver el poder del Amor de Dios, còmo toca y cambia los corazones. Si vivimos en familiaridad, amorosa y gozosa con el Espìritu Santo, no sòlo aprovecharemos las ocasiones para que El haga cosas hermosas en nosotros y por medio nuestro en el pròjimo, sino que nos gozaremos de sabernos instrumentos suyos,facilitadores de sus planes de amor y salvaciòn.
Quizà no sean encuentros espectaculares o llamativos, pero lo que nos parecìa una actividad, aparentemente insignificante o de poco relieve, serà -para dmiraciòn y crecimiento nuestro- una realidad muy hermosa y fecunda, que nos impulsarà a exclamar : ¡Bendita sea por siempre la Santìsima Trinidad que nos ama de tal manera que quiere contar con nuestra pequeña buena voluntad para realizar sus planes de amor y salvaciòn, en personas que viven a nuestro lado o lejos de nosotros !

1 comentario:

  1. Este obispo fue realmente un regalo de Dios para el mundo, y gracias a usted por compartir con nosotros estas bellas anécdotas que él usaba para evangelizar!

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